Alguna vez habéis escuchado el término "bloquear puntos", para que no os pase igual que a mí os lo voy a explicar cómo lo hago. ¿Veis la diferencia?, ambas fotografías son del mismo chal, el detalle de la izquierda es como quedan los puntos sin bloquear, en cambio, el de la derecha ya están bloqueados; los puntos quedan cómo más estirados o definidos y lo que hayáis tejido queda más bonito y no pierde la forma.

¿Y cómo se hace?, es muy simple, introducimos la prenda en un recipiente de agua fría (cuidado, la lana no acrílica encoge en agua caliente) con dos gotitas de suavizante (no os paséis que la lana no es amiga de grandes cantidades de suavizante) y la dejamos a remojo durante 3 o 4 horas.

Después la envolvemos en una toalla y la escurrimos cuidadosamente, la estiramos y la colocamos en una superficie lisa (suelo poner una toalla para que no se moje la cama, mesa, etc.) y la dejamos secar, ¡notaréis el cambio!.